Si alguna vez se ha preguntado por qué no le funciona Internet, AVG está aquí para explicarle cómo puede arreglar la conexión. Vamos a hacer todo lo posible.
Primero... ¡guarde este artículo!
Queremos ayudarle a arreglar la conexión inalámbrica a Internet, pero como este artículo está en Internet, ya puede imaginarse dónde está el problema. De modo que, si tiene una impresora, comience por imprimirlo o, como poco, guarde esta página en su escritorio haciendo clic en Ctrl + S. De ese modo, aunque se corte la conexión a Internet, podrá consultar el artículo.
¿Ya lo ha guardado? Bien. Pero antes de poder arreglar su conexión Wi-Fi tenemos que hacernos otra pregunta:
¿Por qué no funciona el Wi-Fi?
Igual que no es posible curar una infección hasta que se sabe qué virus ha contraído, no se puede arreglar una conexión Wi-Fi hasta que se sabe por qué se ha caído. Por suerte, en casos como este solo hay tres posibles culpables: su dispositivo, su red o la propia Internet.
Su dispositivo
Primero, compruebe si sus demás dispositivos inteligentes siguen conectados a Internet. Si es así, ya sabe que la cuestión se limita al dispositivo problemático, lo que simplifica algo las cosas. Desplácese hacia abajo hasta la sección Cómo arreglar la conexión Wi-Fi en un dispositivo.
Su red
Siempre le decimos que no se conecte sin protección a redes públicas, pero, solo por esta vez, hágalo: busque la red Wi-Fi en funcionamiento más cercana (la casa de un amigo o una cafetería) y compruebe si puede conectarse. Si puede hacerlo, el problema está en su red, no en el dispositivo. Desplácese hacia abajo hasta la sección Cómo arreglar la red Wi-Fi y los problemas con Internet.
La propia Internet
¿Y qué pasa si su dispositivo puede conectarse a la red, pero no es capaz de llegar a ningún sitio web? Primero, pruebe con una amplia selección de sitios para asegurarse de que el problema no sea de ellos (por ejemplo, poco se puede hacer si su sitio web favorito ha sufrido un ataque de denegación de servicio), pero si no funciona absolutamente ningún sitio web, vaya a Cómo arreglar la red Wi-Fi y los problemas con Internet. No obstante, sepa que tal vez tenga que llamar a su proveedor de servicios de Internet (ISP).
Nota: Si Internet le funciona, pero va demasiado lento, siempre hay modos de acelerarlo.
Otras comprobaciones rápidas
Antes de entrar en soluciones más complejas, pruebe antes estas otras más sencillas. Tal vez le ahorren un tremendo dolor de cabeza.
Compruebe las luces del router
En serio, eche un vistazo a la caja. Si alguna luz parece distinta, es señal de que algo va mal. Si no mira al router lo suficiente como para saber si algo está diferente, busque el manual de instrucciones y échele un vistazo: ahí verá lo que significa cada luz y qué puede hacer en caso de problemas.
Acérquese al router
En las casas grandes, especialmente en sitios con muchas interferencias, es posible que la conexión inalámbrica no sea lo bastante potente como para alcanzar su dispositivo. ¡Si la cosa mejora acercándose, hay esperanza! Hay muchas formas de aumentar la potencia de la señal Wi-Fi.
Conectar un cable Ethernet
Esta solución no funcionará para la mayoría de los móviles, pero si el dispositivo problemático cuenta con un puerto Ethernet, conecte un cable Ethernet al router (la mayoría de los routers cuenta con al menos uno de estos puertos) e inserte el otro extremo en su dispositivo. Si Internet funciona, ya sabe que el problema está en la señal inalámbrica, lo que supone un buen punto de partida.
¿Es un problema que se produzca siempre, o solo en ocasiones?
Si la señal inalámbrica simplemente se corta y se recupera de forma aleatoria, es probable que el problema lo cause un software defectuoso en el router o el dispositivo. Si el problema es común a todos sus dispositivos, actualizar el firmware del router podría ayudar (¡y es bueno para la seguridad!). Si solo pasa con un dispositivo, plantéese actualizar sus controladores inalámbricos. Pero hablaremos más al respecto en el próximo punto.
¿Están actualizados el software y el hardware?
Puede ser difícil saber si el software o el hardware están actualizados, sobre todo si no es capaz de conectarse. En el caso del software, lo mejor y más sencillo es instalar un actualizador de controladores, que los comprueba automáticamente e instala cualquier actualización disponible. Sin embargo, si no puede conectarse o si el problema es de un hardware obsoleto, deberá consultar con un experto que pueda proporcionarle las piezas que necesita o instalar los controladores sin conexión.
Lo mismo se aplica a los problemas con el router: aunque es posible actualizar su firmware de forma manual (le mostraremos cómo más adelante en el artículo), es posible que necesite llamar a su ISP o a un experto si no puede conectarse para obtener dichas actualizaciones, o si el problema es del hardware.
¿Para empezar, ¿está activada la conexión Wi-Fi?
Sí, ya, es una pregunta un poco tonta, pero a veces podemos haber desactivado la conexión Wi-Fi, o haber activado el modo avión, por accidente. Haga una comprobación rápida para asegurarse de que no sea ese el problema antes de seguir tirándose de los pelos.
Realice una prueba de ping
Cuando se conecta, envía un montón de pequeños paquetes de datos a un servidor lejano, que a su vez le envía a usted otros paquetes. Ese es el modo en que su PC se comunica con los sitios web. Una prueba de ping es una forma de comprobar si esos pequeños paquetes están llegando a su destino, lo que puede resultar extremadamente útil a la hora de diagnosticar el problema. Así se realiza una prueba de ping:
En Windows 10
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Haga clic en el botón de inicio y escriba «Cmd». En los resultados verá la aplicación Símbolo del sistema; haga clic en ella.
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Aparecerá un cuadro negro, casi vacío, con un cursor parpadeante. Escriba «ping» y presione la barra espaciadora.
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Está listo para realizar la prueba. Siga leyendo más adelante.
En Mac
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Abra Spotlight y escriba «utilidad de red» en la barra de búsqueda.
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Haga doble clic en la aplicación Utilidad de Red para abrirla.
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Busque la pestaña Ping, haga clic en ella y localice el espacio en blanco donde introducir una dirección web.
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Está listo para realizar la prueba. Siga leyendo.
Bien. Llegados a este punto, tanto en Windows como en Mac, puede introducir cualquier dirección web que desee y realizar una prueba de ping. Sin embargo, si lo que desea es diagnosticar el problema, conviene probar estas tres direcciones:
Si ejecuta la prueba y no funciona, obtendrá una cadena de letras y números que no es necesario que comprenda. En ese caso, verá un mensaje de error que diga algo como «Se ha superado el tiempo de espera de la solicitud», «No se puede conectar con el host de destino» o «Fallo de transmisión, código de error #». Si ve estos mensajes, o algo similar, ha dado el primer paso hacia la identificación del problema.
Cómo arreglar la red Wi-Fi y los problemas con Internet
Pues ha llegado el momento de remangarse y comenzar a abordar el problema de que el router no funcione. Sin embargo, muchas de las soluciones que vamos a tratar requieren que tenga acceso al router y al Wi-Fi, por lo que el primer paso es ver cómo conseguirlo. ¿Preparado?
Primero, compruebe el propio router
Si tiene suerte, en el router habrá una pegatina con una dirección IP y una contraseña que le facilitarán el acceso a su funcionamiento interno. Si encuentra esa pegatina, introduzca la dirección IP en la barra de direcciones de cualquier navegador y, a continuación, introduzca el nombre de usuario o la contraseña de la pegatina. Si es la primera vez que hace esto, cabe la posibilidad de que se le pida que actualice el nombre de usuario y la contraseña. Asegúrese de no olvidarlos: son datos muy importantes.
Pero si, a pesar de todo, los olvida...
¿Qué hago si no tengo el nombre de usuario y la contraseña del router?
Primero, consulte la documentación que venía con el router: es muy probable que haya un manual que incluya esa información. Pero si no lo encuentra, o si tiró hace tiempo todos los papeles, ¡no se preocupe! Sigue habiendo una solución.
Visite esta lista de routers y contraseñas predeterminadas, busque su modelo y utilice el nombre de usuario y la contraseña que aparecen. Si no encuentra su modelo, pruebe con «admin» como nombre de usuario y contraseña, o con «password» como contraseña. Es muy posible que funcionen. Y ojo: la existencia de esa lista demuestra lo importante que es que actualicemos el nombre de usuario y la contraseña del router. No hay que ser un hacker para buscar en Google una lista de nombres de usuario y contraseñas predeterminados, y empezar a trastear en el router de la gente.
A lo que vamos. Si usted u otro ha actualizado el nombre de usuario y la contraseña del router y no los recuerda, sigue habiendo esperanza. Busque el botón de restablecimiento («reset») del router y manténgalo presionado entre 10 y 20 segundos. De este modo se restablecerá la configuración de fábrica, incluidos el nombre de usuario y la contraseña predeterminados. Además, hay alguna posibilidad de que el reinicio arregle su problema.
Averigüe la dirección IP del router
Vale, así que no hay una pegatina que le ayude. No se preocupe. Solo hay que añadir un paso más al procedimiento.
En PC con Windows 10
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Haga clic en el botón de inicio en la esquina y escriba «Ver estado de red». Verá la opción Ver el estado y las tareas de red. Haga clic en ella.
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En la esquina superior derecha verá la conexión actual y unas barras que representan la potencia de la señal. Haga clic en el enlace que hay al lado.
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Se abrirá un cuadro de Estado de Wi-Fi. Haga clic en el botón Detalles.
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Ahí verá un montón de texto bastante confuso. Ignórelo prácticamente todo: solo le interesa Puerta de enlace predeterminada IPv4. Busque ese dato y anote los números que hay al lado. ¡Y no se olvide de todos los puntos!
En Mac
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Abra Spotlight y busque “Preferencias del sistema”. Haga clic en Preferencias del Sistema.
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Busque el botón Red y haga clic en él.
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A la izquierda verá algunas conexiones. Busque aquella a la que está conectado en este momento, asegúrese de que está resaltada y de que la luz correspondiente está en verde y, después, haga clic en el botón Avanzado.
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En la pestaña TCP/IP verá una sección Router, seguida por algunos números y puntos. Anote esos datos, incluidos los puntos.
Una vez que tenga los números y puntos, que son la dirección IP del router, solo queda abrir un navegador e introducir la dirección en la barra de direcciones. Se abrirá la página de inicio de sesión del router.
¿No conoce las credenciales de inicio de sesión del router? Consulte la sección anterior.
Ya sabe cómo acceder a su router. Perfecto. Ahora podemos comenzar la solución de problemas en sí.
¿Ha probado a apagar y encender?
La tecnología es extraña. A veces, solo hace falta una pequeña patada en el trasero para que todo vuelva a funcionar. Apague físicamente el router o módem, espere entre cinco y diez segundos, y vuelva a encenderlo. Dele un poco de tiempo para que se ponga en marcha y compruebe si se ha solucionado algo. Si es así, ¡genial! Encantados de haber sido de ayuda.
... Pero si sigue sin funcionar y tiene que andar apagando y encendiendo para que vuelva a funcionar, el problema es más grave. Probablemente necesite un nuevo módem o router.
Cambie el canal inalámbrico
Las redes inalámbricas no son mágicas. Utilizan «canales» para viajar por el aire y algunos canales son mejores que otros, especialmente en áreas congestionadas con muchos dispositivos. Cambiar el canal en el que opera su conexión inalámbrica podría no solo arreglar la conexión Wi-Fi, sino también hacerla más rápida... si tiene suerte.
En cualquier caso, inicie sesión en el router mediante los pasos detallados anteriormente y busque la página Configuración inalámbrica. Nos gustaría ayudarle a encontrarla, pero cada router tiene una configuración distinta, así que es posible que deba rebuscar un poco. Cuando la encuentre, verá un montón de formas de ajustar la señal inalámbrica. De momento, busque la opción que indica Canal: probablemente estará junto a un menú desplegable y mostrará números que representan GHz. Preste mucha atención al canal en el que se encuentra actualmente.
Ahora, pruebe cualquier otro canal (sirve cualquiera distinto) y aplique el cambio. Espere unos minutos para comprobar si hay algún cambio y, después, pruebe con otro canal.
Si descubre un canal nuevo que funciona, ¡estupendo! ¡Disfrute de la red! Pero si este cambio no funciona, recuerde volver al canal inicial antes de intentar otras soluciones. Si no lo hace, podría arreglar la conexión Wi-Fi y no darse cuenta si resulta que el nuevo canal que dejó configurado no funciona.
Actualice el firmware
La tecnología depende del hardware y el software para hacer su trabajo, y entre ambos está el firmware, que tiene un poco de «hard» y un poco de «soft». Un genio, quien le puso el nombre. Muchos dispositivos actualizan automáticamente el firmware cuando detectan una nueva actualización, pero es habitual que en los routers deba hacerse de forma manual, lo que podría resolver algunos de sus problemas de conectividad.
Primero, inicie sesión en el router con el método detallado anteriormente. Después, tendrá que rebuscar un poco para encontrar una pestaña o sección llamada Firmware, Actualización del router, Actualización o algo similar. Dependerá del router que esté utilizando, por lo que, si no está seguro, eche un vistazo por si acaso.
Cuando dé al fin con esta opción, verá claramente la versión actual del firmware y habrá un botón que indique algo como Comprobar, Examinar o Actualizar. Haga clic para ver si hay una versión más reciente del firmware que pueda instalar. El router descargará la actualización por su cuenta, o tal vez le pida que haga clic en algunos enlaces y que realice el proceso de forma manual. Siga las instrucciones indicadas.
Pero digamos que no encuentra la página del firmware o que no hay ningún botón que le ayude. No se desespere: compruebe bien el modelo del router y visite el sitio web del fabricante. Debería haber una página o sitio de soporte donde descargar el firmware más reciente. Y si no es así... bueno, pues tiene un router bastante malo.
Plantéese cambiarlo.
Compruebe los cables
Vaya al router y compruebe si todo está conectado como debería. Si no es así, arréglelo y compruebe si todo vuelve a funcionar.
Si hay suerte, ahí termina todo.
Compruebe su configuración DHCP
DHCP (siglas en inglés de Protocolo de configuración dinámica de host) es un sistema que distribuye de forma rápida y automática direcciones IP en una red. Las direcciones IP son importantes, ya que son el ingrediente clave que permite a los dispositivos conectarse y comunicarse por Internet. Por tanto, si hay algún problema en su DHCP, Internet no le funcionará muy bien, si es que funciona.
Primero, hay que asegurarse de que esté activado.
En Windows 10
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Abra el menú de inicio y escriba «Configuración». Haga clic en el botón Configuración.
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Haga clic en Red e Internet.
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Si tiene una conexión inalámbrica, haga clic en la pestaña Inalámbrica a la izquierda. Si está conectado mediante Ethernet, haga clic en la pestaña Ethernet.
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Debería ver su conexión actual. Haga clic en ella y se abrirá otra ventana.
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En Configuración de IP, verá una opción de Asignación de dirección IP. Si indica Automática (DHCP), está activada.
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Si no es así, haga clic en el botón Editar que hay abajo y seleccione Automática (DHCP).
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Compruebe si Internet funciona mejor.
En Mac
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Abra Spotlight y busque «Preferencias del sistema». Haga clic en Preferencias del Sistema.
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Busque y haga clic en el botón Red.
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Asegúrese de que su red está resaltada y de que tiene al lado un botón verde y, a continuación, haga clic en el botón Avanzado.
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Haga clic en la pestaña TCP/IP.
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La primera opción que debería ver es Configurar IPv4. Si ahí no aparece Usar DHCP, haga clic en el menú desplegable y seleccione ese ajuste.
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Compruebe si Internet funciona mejor.
Si no funciona, queda una cosa más por hacer: puede ajustar en el propio router el modo en que funciona DHCP. Sin embargo, esto solo debe intentarse como último recurso, o solo antes de optar por un restablecimiento completo del router a los valores de fábrica (lo que veremos en la próxima sección), salvo que sepa de verdad lo que está haciendo.
Primero, inicie sesión en el router mediante los pasos detallados anteriormente y rebusque hasta que dé con la configuración del aparato. Cada router tiene una configuración propia, así que es posible que deba escarbar un poco. Cuando dé con ello, pruebe a buscar algo denominado «Configuración del servidor DHCP». Podrá activar o desactivar la opción, aparte de trastear con otros elementos, entre los que podrían estar...
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Dirección IP de inicio: es la dirección IP del router. Cambiarla no le ayudará, así que es preferible no tocarla.
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Número máximo de usuarios: básicamente, decide cuántas direcciones IP gestiona DHCP al mismo tiempo. Si tiene 50 vecinos gorrones, puede ser conveniente reducir este número. En cualquier otro caso, es mejor dejar el valor predeterminado.
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Intervalo de direcciones IP: está relacionado con el número máximo de usuarios e indica el intervalo de números que utilizará DHCP para distribuir nuevas direcciones IP. Si ve que el intervalo es menor que el número máximo de usuarios, hay un problema: significa que una dirección IP podría solaparse, lo que es causa de conflictos.
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Tiempo de concesión de cliente: esta opción le permite decidir el tiempo máximo durante el cual un dispositivo obtiene una dirección IP antes de que esta deba renovarse, cambiarse por otra o directamente cancelarse. Si hay un montón de dispositivos en su red, tal vez haga falta reducir el tiempo de concesión para evitar el acaparamiento de direcciones IP. Si no hay muchos dispositivos, alargar el tiempo puede ayudar a que todo funcione mejor. De este modo podrían arreglarse los problemas de conectividad intermitente.
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Reserva DHCP: esta opción le permite «reservar» una dirección IP específica del intervalo de direcciones IP para un dispositivo concreto. Si decide reservar una dirección, necesitará la dirección física (o MAC) del dispositivo, que puede encontrar consultando las Propiedades de su conexión inalámbrica o Ethernet.
Pero repetimos: realice estos cambios solo como último recurso.
Restablezca el router a su configuración de fábrica
Es como apagar y volver a encender pero llevado a su extremo lógico, ya que devuelve el router a la configuración que tenía cuando salió de la fábrica. Si el router le da problemas desde hace poco, de este modo podría resolverlos. Sin embargo, si había realizado cambios en la configuración del router, se perderán.
El procedimiento es muy sencillo. Todos los routers tienen un botón de restablecimiento («reset») que suele estar escondido en un pequeño orificio en la parte posterior. Puede ser necesario utilizar un alfiler o similar para alcanzarlo. Búsquelo y manténgalo presionado entre diez y veinte segundos. Con eso bastará. Dele un tiempo al router para que se configure y compruebe si se ha resuelto el problema.
Juegue con el adaptador de red
Si realizó la prueba de ping mencionada anteriormente y obtuvo un error al probar con su propia dirección IP, es posible que el adaptador de red esté liando las cosas. Este problema suele resolverse reiniciando el ordenador o activando DHCP (como se ha explicado anteriormente), pero en ocasiones no es suficiente.
Actualice los controladores
Puede probar a actualizar el controlador del adaptador de red. Los Mac lo hacen automáticamente, aunque en Windows es un proceso bastante sencillo. Sin embargo, se necesita acceso a Internet. Abra el menú de inicio, escriba «administrador de dispositivos» y haga clic en el botón Administrador de dispositivos que aparece. Desplácese hacia abajo hasta la opción Adaptadores de red, haga clic en ella y, después, haga clic en su adaptador. Debería poder comprobar si hay actualizaciones e instalar cualquier nuevo controlador.
Límpielo, literalmente
Si utiliza un PC de sobremesa, puede probar a abrir la carcasa y desconectar el propio adaptador de red.
Uno inalámbrico tiene este aspecto:
Y uno con cable tiene este aspecto:
El modo más seguro de identificarlo es por el punto de conexión: busque un puerto dirigido hacia fuera en el que podría atornillar una antena (como en el primer ejemplo) o conectar un cable Ethernet (como en el segundo). Si se siente cómodo haciéndolo, puede probar a apagar por completo el PC (y me refiero a apagarlo y desenchufarlo, no a ponerlo en reposo), extraer el adaptador de red y limpiarlo con aire comprimido. Debe utilizar aire comprimido: si utiliza un paño o un aspirador, podría dañar la pieza.
Vuelva a conectar el adaptador, encienda el PC y compruebe si ha servido de algo. Aunque no haya resuelto el problema, tendrá un PC un poco más limpio.
Técnicamente, también es posible hacerlo con ordenadores portátiles, pero no recomendamos hacerlo si no es un profesional. Además, en el caso de un ordenador Apple de sobremesa la garantía podría quedar invalidada, así que no lo intente con un Mac.
Póngase en contacto con su ISP
Muy bien. Si ninguna de las soluciones anteriores ha funcionado, nos queda esto. Es hora de llamar a su proveedor de servicios de Internet y pedirle ayuda. Ya, ya sabemos, pero hay momentos en la vida en que no queda otra.
Además, si ha probado aunque sea algunos de los pasos anteriores, se ahorrará tiempo y dolores de cabeza, porque podrá explicarle a la persona con la que hable lo que ya ha intentado y será más sencillo para el ISP averiguar cuál es el problema y ofrecerle sugerencias útiles.
Cómo arreglar la conexión Wi-Fi en un dispositivo
Así que el problema no está en el propio router. ¡Buena noticia! Arreglar la conexión Wi-Fi de un único dispositivo puede ser mucho más sencillo... a veces. Así que coja el dispositivo problemático y vamos a probar los remedios clásicos.
Reinicie el dispositivo
No, no me refiero a cerrarlo y volverlo a abrir, ni a ponerlo en reposo. Apáguelo y, después, vuelva a encenderlo. Le sorprendería cuántas veces se resuelven de este modo no solo los problemas de Wi-Fi, sino toda clase de percances tecnológicos. Y más fácil no puede ser, así que merece la pena intentarlo antes de probar nada más.
Si no funciona, también puede probar algunos trucos para limpiar y acelerar su PC. Podría ser lo que el equipo necesitaba para entenderse de nuevo con la red Wi-Fi.
¿Y un restablecimiento a los valores de fábrica?
Si el dispositivo se conectaba a Internet, pero ha dejado de hacerlo, un restablecimiento a los valores de fábrica podría arreglar el problema, pero solo si es una cuestión de software y no de hardware. Además, lo más probable es que el proceso requiera bastante tiempo y le cueste todos los archivos personales que tuviera guardados, así que recurra a esta solución solo si tiene una copia de todos sus archivos y ya ha intentado las demás opciones.
Hay un lado positivo: si restablece la configuración de fábrica y el cacharro sigue sin funcionar, sabrá que el problema es de hardware. Y si opta por cambiarlo directamente por un dispositivo nuevo, ya tendrá el antiguo en estado de reciclaje seguro. ¡Hay que ver el lado bueno!
En Windows 10
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Abra el menú de inicio y escriba «restablecer».
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Haga clic en Restablecer este PC.
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En la sección Restablecer este PC, haga clic en Comenzar.
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Tendrá la opción de conservar o no sus archivos personales. Le sugerimos que al principio pruebe a conservarlos, pero asegúrese de que tiene preparada una copia de seguridad.
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Comenzará el restablecimiento. Asegúrese de que el PC se mantiene enchufado a la toma de corriente o podrían producirse errores.
En Mac
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Primero asegúrese de haber realizado una copia de seguridad.
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Desautorice su cuenta de iTunes y cualquier otra aplicación de terceros con instalaciones limitadas, ya que un Mac restablecido contará para el límite.
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En el caso de iTunes, es bastante sencillo: abra la aplicación y haga clic en Cuenta-
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Haga clic en Autorizaciones y en Retirar autorización a este ordenador.
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Introduzca sus datos de inicio de sesión y ya lo tiene.
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Inicie el Mac en modo de recuperación. Para ello, mantenga pulsadas las teclas Comando y R mientras se inicia.
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Haga clic en Utilidad de Discos y, después, en Continuar.
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Seleccione el volumen principal y luego haga clic en Desmontar y borrar.
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Salga y siga las instrucciones para volver a instalar el sistema operativo.
En Android
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Realice una copia de seguridad de los datos (se puede hacer fácilmente desde la nube).
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Toque el cajón de aplicaciones.
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Busque el icono Ajustes y tóquelo.
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En el panel izquierdo, toque Copia de seguridad y restablecer.
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En el panel derecho, desmarque las opciones Realizar copia de seguridad de mis datos y Restauración automática. De lo contrario, después del restablecimiento de fábrica podrían restaurarse todos los datos en el dispositivo.
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Luego toque la opción Restablecimiento de fábrica y siga las instrucciones.
En iOS
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Vaya a General.
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Abra Ajustes. Verá una opción llamada Restablecer. Púlsela.
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Busque la opción Borrar contenidos y ajustes.
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Tóquela e introduzca sus credenciales.
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El teléfono se borrará.
Ejecute un diagnóstico de red
Los diagnósticos de red (o procedimientos de solución de problemas de red) tienen la mala (y no inmerecida) fama de ser moderadamente inútiles. Pero son sencillos e inofensivos, y en ocasiones resuelven el problema, así que merece la pena probarlos.
En Windows 10
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Haga clic con el botón derecho en el símbolo inalámbrico, en la esquina inferior derecha de la pantalla.
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Haga clic en Solucione el problema con la configuración de red.
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Siga las instrucciones.
En Mac
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Vaya al menú Apple y haga clic en Preferencias del Sistema.
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Haga clic en Ayúdame y, después, en el botón Diagnóstico. Se abrirá la herramienta Diagnóstico de red.
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Haga clic en Continuar y siga las instrucciones.
Los Mac también cuentan con un diagnóstico mucho más profundo que podría solucionar el problema.
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Si tiene conectado al ordenador algo que no sea un ratón, un teclado, una pantalla, el cable de alimentación y un cable Ethernet, desconéctelo.
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Apague el Mac, enciéndalo de nuevo e, inmediatamente, mantenga pulsada la tecla D.
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Manténgala pulsada hasta que aparezca una pantalla que le pregunta por su idioma. Elija uno. Preferiblemente, uno que entienda.
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Pasará algunos minutos probando algunas cosas. Siga las instrucciones que aparezcan en la pantalla.
En Android y iOS
Si su teléfono Android o iPhone no se conectan a la red Wi-Fi, tenemos una mala noticia: sus sistemas operativos no incluyen ninguna herramienta de diagnóstico de red. No obstante, puede descargar aplicaciones que sirven al mismo propósito. Para Android, pruebe Network Analyzer; para iPhone, puede mirar Pingify.
Compruebe su contraseña Wi-Fi
En ocasiones, los dispositivos olvidan una contraseña Wi-Fi ya introducida (o incluso la recuerdan de forma incorrecta), normalmente por culpa de un fallo o error. Por tanto, pruebe a consultar la configuración inalámbrica y compruebe si todo está como debería.
Es técnicamente posible hacerlo en dispositivos Android y iOS, pero tendrá que A) «rootear» o utilizar Jailbreak en los dispositivos, lo que supone un riesgo y puede invalidar la garantía, o B) descargar aplicaciones que no están en las tiendas oficiales, ya que incumplen los términos del servicio, lo que supone un riesgo para la seguridad. Por tanto, solo le enseñaremos cómo se hace en Windows y en Mac.
En Windows 10
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Haga clic en el botón de inicio, en la esquina inferior izquierda, y escriba “Ver estado de red”. Haga clic en la opción Ver el estado y las tareas de red que aparece.
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En la esquina superior derecha verá la conexión actual y unas barras que representan la potencia de la señal. Haga clic en el enlace que hay al lado.
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Debería abrirse una ventana de Estado de Wi-Fi. Haga clic en Propiedades inalámbricas.
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Haga clic en la pestaña Seguridad.
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Ahí encontrará el tipo de seguridad, así como la contraseña. Haga clic en Mostrar caracteres y compruebe que la contraseña coincide con sus registros.
En Mac
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Abra la búsqueda de Spotlight y escriba “Acceso a llaveros”. Haga clic en la aplicación que aparece.
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En la esquina inferior izquierda verá algunas categorías. Asegúrese de que Contraseñas está resaltado y, en la lista, haga doble clic en su red. Si conoce el nombre, puede utilizar la búsqueda en la esquina superior derecha.
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Haga clic en Mostrar contraseña en la parte inferior. Es posible que deba introducir el nombre de usuario y contraseña de administrador.
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Compruebe que la contraseña coincide con sus registros. Si no es así, actualícela y pruebe de nuevo.
Restablezca su configuración TCP/IP
Si realizó la prueba de ping mencionada anteriormente y no pudo contactar con el DNS público de Google, este es el paso que debe realizar. En cualquier caso puede merecer la pena, ya que no supone ningún perjuicio para su PC o Mac.
En Windows 10
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Abra el menú de inicio y busque «cmd».
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Haga clic con el botón derecho en Símbolo del sistema y haga clic en Ejecutar como administrador.
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Se abrirá un cuadro negro con un cursor parpadeante. Escriba «netsh int ip reset», sin las comillas, y pulse Intro.
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Espere un poco a que termine la ejecución y luego reinicie el PC. Compruebe si ha servido de ayuda.
En Mac
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Haga clic en el icono de Apple, en la esquina superior izquierda de la pantalla, y haga clic en Preferencias del Sistema.
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Seleccione Red.
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Busque su red actual, asegúrese de que está resaltada y haga clic en Avanzado.
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Busque la pestaña TCP/IP, haga clic en ella y luego en Renovar concesión de DHCP.
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Haga clic en “Aceptar” y compruebe si ha funcionado.
Elimine la red inalámbrica y vuelva a añadirla
Esta solución es similar a reiniciar la red: a veces, simplemente basta con sacudir un poco el dispositivo (figuradamente) para que vuelva a funcionar bien. Además, es de lo más sencillo.
En Windows
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Haga clic en el icono inalámbrico en la esquina inferior derecha de la pantalla.
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Aparecerán todas las redes inalámbricas disponibles. Haga clic con el botón derecho en la conexión actual y, después, haga clic en Olvidar.
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Perderá la conexión, pero si comprueba la lista de redes inalámbricas disponibles, seguirá viéndola ahí.
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Haga clic en ella y pulse Conectar. Es posible que deba introducir de nuevo sus credenciales.
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Compruebe si funciona.
En Mac
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Haga clic en el icono inalámbrico en la esquina de la pantalla y seleccione Abrir el panel de preferencias de Red.
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Resalte Wi-Fi en las opciones de la izquierda y, después, haga clic en el botón Avanzado.
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Haga clic en la pestaña Wi-Fi y busque su conexión actual en la lista de Redes preferidas.
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Haga clic en el botón - debajo de la lista y, a continuación, en la pantalla emergente que se abre, haga clic en Eliminar.
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Pulse Aceptar para salir del menú, pulse Aplicar y, a continuación, intente volver a conectarse a la red haciendo clic en el botón Wi-Fi, en la esquina superior derecha de la pantalla. Es posible que deba introducir de nuevo sus credenciales.
En Android
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Toque el icono Ajustes.
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Toque Wi-Fi.
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Busque la conexión actual y manténgala pulsada hasta que aparezcan nuevas opciones. Haga clic en Olvidar red.
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Intente conectarse de nuevo a la red y compruebe si ha servido de ayuda. Es posible que deba introducir de nuevo sus credenciales.
En iOS
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Toque la aplicación Ajustes.
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Toque Wi-Fi.
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Toque el botón de la i minúscula junto a su red.
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Toque Omitir esta red y cierre los ajustes.
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Intente conectarse de nuevo a la red y compruebe si ha servido de ayuda. Es posible que deba introducir de nuevo sus credenciales.
Borre la caché del navegador
La caché del navegador es un valioso almacén de datos de sitios web que puede ayudarle a cargar las páginas más rápido, pero que también puede interferir en su conexión si hay algún problema. El procedimiento para borrar la caché del navegador varía de uno a otro, así que busque el suyo en la lista siguiente. Por cierto: limpiar el navegador también lo hace más seguro, por lo que merece la pena probar, aunque no se arregle su conexión Wi-Fi.
Google Chrome
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En primer lugar, abra Chrome.
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Haga clic en los tres puntos de la esquina superior derecha.
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Haga clic en Historial y luego, en el menú lateral, vuelva a hacer clic en Historial.
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Se abre una pestaña nueva. En la parte de la izquierda, verá la opción Borrar datos de navegación. También puede encontrarla con las tres barras en la parte superior.
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Se abre otra pestaña nueva y una ventana. En el menú desplegable superior, elija Desde siempre y asegúrese de que la casilla Archivos e imágenes almacenados en caché esté marcada.
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Haga clic en Borrar datos y compruebe si ha servido de ayuda.
Firefox
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Obviamente, para empezar abra Firefox.
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En la barra de menús, haga clic en Historial.
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Haga clic en Limpiar el historial reciente.
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Asegúrese de que la opción Caché esté marcada y elija Todo en el menú desplegable superior.
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Haga clic en Limpiar ahora y compruebe si ha servido de ayuda.
Microsoft Edge
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Abra Microsoft Edge.
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Haga clic en los tres puntos que hay a la derecha del campo de dirección web.
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Haga clic en Historial con el icono de flecha desplegable.
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Haga clic en Borrar historial.
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Asegúrese de que la opción Datos y archivos en caché esté marcada y, después, haga clic en Borrar.
Opera
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Abra Opera.
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Abra el menú de Opera en la esquina superior izquierda de la pantalla.
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Sitúe el cursor sobre Historial y haga clic en Borrar datos de navegación.
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Haga clic en Imágenes y archivos en caché y, a continuación, haga clic en Borrar datos.
-
Compruebe si ha servido de ayuda.
AVG Secure Browser
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Para empezar, abra el navegador.
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Haga clic en los tres puntos situados en la parte superior derecha de la pantalla y luego en Historial.
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Se abre una pestaña nueva. Haga clic en la pestaña Limpiador de privacidad.
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Se abre otra pestaña nueva y una ventana. En el menú desplegable superior, elija El origen de los tiempos y asegúrese de que la casilla Archivos e imágenes almacenados en caché esté marcada.
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Haga clic en Borrar datos de navegación y compruebe si ha servido de ayuda.
En dispositivos móviles
Sí, allá vamos otra vez.
Firefox
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Abra la aplicación.
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Haga clic en los tres puntos de la esquina.
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Toque Ajustes y desplácese hacia abajo, hasta Borrar datos privados.
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Asegúrese de que haya una marca de verificación junto a Caché.
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Toque BORRAR DATOS.
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Y ya está.
Google Chrome
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Toque la aplicación.
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Haga clic en los tres puntos de la esquina derecha.
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Toque Historial y luego, en la parte superior de la ventana nueva, toque Borrar datos de navegación…
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Cambie el intervalo de tiempo a Desde siempre.
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Asegúrese de que la opción Archivos e imágenes almacenados en caché esté marcada y después haga clic en Borrar datos.
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Compruebe si ha servido de ayuda.
Microsoft Edge
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Abra la aplicación.
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Haga clic en la estrella con tres rayas que hay arriba a la derecha.
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Haga clic en el símbolo de un reloj con una flecha. Es el cuarto a la derecha.
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Haga clic en el icono de la papelera y confirme que desea borrar el historial.
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Cambie el intervalo de tiempo a Desde siempre y luego asegúrese de que la opción Datos y archivos en caché esté marcada.
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Haga clic en Borrar y ya está.
Opera
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Abra la aplicación.
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Busque el botón O en la parte inferior derecha y tóquelo.
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Haga clic en el icono del reloj, que es su Historial, y luego toque el icono de la papelera arriba a la derecha. Confirme que quiere borrar el historial de navegación.
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Pues no hay más. Compruebe si ha servido de ayuda.
Elimine aplicaciones y complementos problemáticos
En ocasiones, las aplicación y complementos instalados hace poco pueden ser el origen de sus problemas, especialmente si acaparan Internet o, crucemos los dedos, si se trata de malware camuflado. Eliminarlos del sistema debería bastar para que recupere Internet. Puede comenzar desinstalando las aplicaciones y complementos que haya instalado más recientemente, antes de que aparecieran los problemas (hablaremos de eso en breve), o puede intentar ser más preciso e identificar qué aplicaciones podrían ser las responsables. Por suerte, hay un modo sencillo de comprobar qué aplicaciones pueden estar causando problemas: nuestro viejo amigo, el administrador de tareas.
En PC, puede abrir fácilmente el administrador de tareas pulsando las teclas Ctrl + Mayús + Esc al mismo tiempo. Dentro verá un montón de procesos, pero solo necesita prestar atención a la categoría más a la derecha, Red. ¿Ve encima un porcentaje muy grande? Si es así, desplácese hacia abajo y vea qué aplicaciones están consumiendo tantos recursos de red. Si no es así, el problema está en otra parte.
En un Mac, el Monitor de Actividad hace la misma función. Puede buscarlo con Spotlight o en la carpeta Utilidades. Cuando se abra, pulse en la pestaña Red en la parte superior. Compruebe si algún dispositivo está ocupando un gran espacio de red. Si es así, ahí tiene el problema. En caso contrario, este procedimiento no le ayudará a arreglar la conexión Wi-Fi.
En dispositivos Android es un poco más complicado. No hay un modo sencillo de ver qué aplicaciones están dañando la conexión, así que necesita la ayuda de una aplicación de terceros. Recomendamos GlassWire.
En iOS, comience abriendo Ajustes y toque Datos móviles. Busque la sección donde se enumeran sus aplicaciones. Verá un conmutador para cada una y una indicación de cuántos datos utilizan. Si alguna aplicación está consumiendo muuuuuchos más datos de los razonables, es muy posible que sea la que causa los problemas.
Pero no basta con encontrar la aplicación problemática: también hay que eliminarla. Así que…
En Windows 10
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Abra el menú de inicio.
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Escriba “Agregar”. Agregar o quitar programas debería ser la primera opción sugerida. Haga clic en ella.
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Verá una lista de todos los programas que puede eliminar. Busque aquel que ya no quiera, haga clic en él y, después, haga clic en [Desinstalar].
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Siga las instrucciones y compruebe si ha servido de ayuda.
En Mac
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Busque con Spotlight el icono o la aplicación que ya no desea.
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Haga clic en él y arrástrelo al icono de la papelera.
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También puede utilizar el método abreviado Tecla Mac + Retroceso.
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Haga clic con el botón derecho en la papelera y seleccione Vaciar papelera.
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¡Ya está!
En Android
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Mantenga pulsado el icono de la aplicación.
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Arrástrelo hasta la parte superior de la pantalla.
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Eso es todo.
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Si no encuentra la aplicación problemática en la pantalla principal, vaya a los Ajustes.
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Desplácese hacia abajo y toque Administración de aplicaciones.
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Busque la aplicación problemática y tóquela.
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Si no es esencial, debería tener la opción de desinstalarla.
En iOS
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Busque la aplicación que ya no quiera.
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Manténgala pulsada. Enseguida comenzará a temblar. Espere a que todas las aplicaciones comiencen a temblar.
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Haga clic en la x que aparece en la esquina.
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Confirme que desea eliminar la aplicación.
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Si no encuentra el icono, vaya a Ajustes.
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Toque General y busque Almacenamiento del iPhone.
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Elija la aplicación que ya no desee y seleccione Eliminar app.
Aunque no encuentre ninguna aplicación que cause problemas graves, los programas pueden acumular archivos residuales y otros datos basura que van ralentizando el funcionamiento. Librarse de todo no le ayudará con la conexión Wi-Fi, pero podría servir para que el navegador funcione mejor.
Actualice el dispositivo y los controladores
Son dos procedimientos distintos, pero ambos consisten en actualizar, así que vamos a juntarlos.
Actualización de controladores
Los controladores obsoletos pueden provocar toda clase de problemas en un PC, entre ellos la incapacidad para reconocer una señal inalámbrica. Aunque, en ocasiones, una mala actualización de un controlador puede dejarlo fastidiado hasta que el responsable publique una solución.
Los Mac y los dispositivos Android y iOS se actualizan automáticamente. No tiene mucho que hacer al respecto. Los PC, sin embargo, requieren actualizaciones manuales, lo que, por supuesto, precisa alguna clase de conexión a Internet o bien contratar a un experto que le envíe las actualizaciones en un dispositivo USB.
Aunque lo mejor y más sencillo es utilizar un software de actualización de controladores (como AVG Driver Updater), es perfectamente posible hacerlo uno mismo. Abra el menú de inicio, escriba “administrador de dispositivos” y haga clic en el botón Administrador de dispositivos que aparece. Ahí verá toda clase de dispositivos con controladores: puede haber muchos que necesiten actualizarse, pero concéntrese específicamente en Adaptadores de red, Equipo, Unidades de disco, Bluetooth, Proximidad y Dispositivos del sistema. Todo aquello que parezca tener alguna relación con su conexión inalámbrica.
¿Qué pasa si el problema es un controlador actualizado?
Para ser sinceros, si el problema lo causa un controlador actualizado recientemente, es probable que no pueda resolverlo usted solo. Algunos programas de actualización de controladores (como AVG Driver Updater) cuentan con una función de reversión capaz de deshacer las actualizaciones problemáticas, pero en el caso de Android, iOS, Mac y dispositivos Windows actualizados de forma manual, lo único que cabe hacer en realidad es esperar a que se publique una nueva revisión. Debería ser un proceso bastante rápido. Consulte en el sitio web o en otras páginas si sus problemas de Wi-Fi podrían deberse a un controlador defectuoso: si es así, no será el único que lo sufre.
Actualice el dispositivo
Y vistos los controladores, ¿qué hay de actualizar el dispositivo mismo? En ocasiones puede servir de ayuda, aunque, como en el caso de los controladores, debe poder conectarse para que funcione.
En Windows 10
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Abra el menú de inicio.
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Escriba “Actualizar” y haga clic en Buscar actualizaciones.
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Vuelva a hacer clic en el botón Buscar actualizaciones.
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Siga las instrucciones y compruebe si ha servido de ayuda.
En Mac
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Vaya al menú Apple y haga clic en Preferencias del Sistema.
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Haga clic en Actualización de software.
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El sistema realizará una comprobación. Siga las instrucciones que aparezcan en la pantalla.
En Android
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Toque Ajustes.
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Desplácese hacia abajo, hasta Sistema, y toque Actualizador.
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Haga clic en el botón Buscar actualizaciones.
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Siga las instrucciones que se indiquen.
En iOS
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Toque Ajustes.
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Busque Actualización de software en General.
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Si hay alguna disponible, se lo indicará y le dirá cómo puede instalarla.
Borre la caché DNS
Como la caché del navegador, una caché DNS es una carpeta temporal donde su equipo guarda datos de sitios web para que todo se cargue más rápido. Borrar esta caché puede ser la patada en el trasero que su dispositivo necesita para empezar a comportarse debidamente.
En Windows
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Primero, cierre por completo todos los navegadores.
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Haga clic en el botón de inicio y escriba «cmd». Haga clic en Símbolo del sistema.
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Verá una gran pantalla negra. Escriba “ipconfig /flushdns” sin las comillas.
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Presione Intro.
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Pruebe a ver si sus navegadores funcionan ahora.
En Mac
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Primero, cierre todos los navegadores.
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Abra Spotlight y busque “Terminal”. Haga clic en la aplicación Terminal.
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En la pantalla que aparece, escriba o pegue la siguiente cadena de texto:
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sudo killall -HUP mDNSResponder;say DNS cache has been flushed.
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Presione Retorno. Es posible que deba introducir su contraseña.
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Compruebe si sus navegadores funcionan ahora.
En Android
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Primero, vaya a los Ajustes y desplácese hacia abajo, hasta Administrador de aplicaciones. Tóquelo.
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Busque su navegador web en la lista y tóquelo.
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Toque el botón Borrar caché.
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Repita el proceso con todos los navegadores que tenga instalados y compruebe si le sirve de ayuda.
En iOS
Más sencillo no puede ser: solo tiene que activar el modo Avión y después volver a desactivarlo. Al hacerlo, la caché DNS se borra automáticamente. Sin embargo, si eso no funciona, puede intentar un procedimiento algo más complejo para borrar la caché DNS: realizar un restablecimiento de la red.
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Vaya a Ajustes, General y Restablecer.
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Busque Restablecer ajustes de red y toque la opción. De este modo se borrará la caché DNS y los ajustes de red se restablecerán al estado que tenían cuando compró el dispositivo. Es posible que así se resuelva el problema.
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Todo el dispositivo se reiniciará. Cuando vuelva a iniciarse, compruebe si funciona mejor.
Desactive el antivirus o el cortafuegos
Muy raramente, un ajuste entrometido del cortafuegos o un fallo del antivirus pueden afectar a la conexión a Internet. Obviamente, no debe pasar sin estas dos herramientas de seguridad esenciales, pero, si las desactiva temporalmente y comprueba que Internet vuelve a funcionar, al menos sabrá dónde está el problema.
En ese caso, lo mejor que puede hacer es desinstalar y volver a instalar por completo el antivirus. De este modo se restablecerán los ajustes y se arreglará el problema. Dicho esto, si el cortafuegos o el antivirus problemático es Windows Defender, no cabe “desinstalar y volver a instalar”, ya que viene integrado en prácticamente todos los dispositivos Windows. En ese caso, tendrá que deshabilitarlo temporalmente el tiempo suficiente para descargar otro antivirus (¿podemos sugerirle AVG?), ante el que Windows Defender se «inclinará» de forma predeterminada, lo que debería arreglar el problema.
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Abra la aplicación Windows Defender. Probablemente lo encuentre como un icono en la esquina inferior derecha, o puede buscarlo en el menú de inicio.
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Haga clic en el engranaje en la esquina superior derecha de la aplicación para abrir la Configuración.
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Busque una opción llamada Protección en tiempo real. Desactívela.
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Ahora, vaya de nuevo al menú de inicio y busque «configuración». Haga clic en Configuración.
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Haga clic en Actualización y seguridad.
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Haga clic en Seguridad de Windows en la lista de la izquierda y, luego, haga clic en Firewall y protección de red.
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Seleccione su red y desactive Firewall de Windows.
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¡Corra e instale un nuevo programa antivirus!
¿Sigue teniendo problemas?
Si ha seguido todo el artículo y no hemos podido resolver el problema, es probable que se enfrente a algo bastante grave. Pero no se preocupe, aún nos queda un as bajo la manga: El Soporte técnico de AVG. Nuestros expertos diagnosticarán el problema de forma gratuita y, si necesita ayuda para arreglarlo, también podemos hacerlo (por una tarifa). Y podemos arreglar cualquier problema en cualquier dispositivo, no solo de redes inalámbricas, así que, la próxima vez que tenga problemas tecnológicos, no dude en avisarnos.
Resumiendo
Todo aquello que hace maravillosa la tecnología también la hace frustrante y confusa cuando no funciona bien. Es un verdadero fastidio verse desconectado en un mundo tan conectado, pero con un poco de ayuda experta, algo de valor y mucha paciencia, debería ser capaz de arreglar hasta los problemas más molestos.
Y recuerde: si se siente demasiado frustrado, salga a dar un paseo, lea un libro, haga algo relajante y respire hondo. Es bueno para el alma y ¿quién sabe? Quizá el problema se resuelva dándole un poco de tiempo.
Porque repetimos: a veces la tecnología es extraña.