En AVG hemos elaborado una lista de comprobación de seguridad para el correo electrónico a fin de ayudarte a defenderte de las peores amenazas.
1. Usa contraseñas complejas
No utilices series obvias, como 123456789, ni ninguna combinación de tu nombre y fecha de nacimiento. Crea una contraseña extraña y que tenga, al menos, 16 caracteres. Para que la puedas recordar, usa la primera letra de cada palabra de una frase concreta y sustituye algunas por números (pero evita las asociaciones evidentes, como @ en lugar de «a» o 5 en lugar de «S»). Así, de la frase «Una tarde, cuando se ponía el sol y un fuego ardía en la selva, por el sendero apareció un vagabundo», saldría la contraseña «1t,cspesyufaels,pesa1v».
2. No recicles la contraseña
Nunca uses la misma contraseña dos veces. Ni siquiera emplees variaciones. Así salvaguardas las otras cuentas digitales que tienes si tu correo electrónico sufre algún ataque. Para simplificar las cosas, añade caracteres específicos para indicar a qué cuenta corresponde cada contraseña. Por ejemplo, en «ce1t,cspesyufaels,pesa1v», las letras «ce» representan «correo electrónico».
3. No descargues las imágenes automáticamente
Permitir la descarga de imágenes y su visualización en HTML puede entrañar riesgos, ya que, de este modo, los remitentes de spam saben que tu correo electrónico está activo y es, por lo tanto, un posible blanco. Por ello, conviene que definas la configuración del correo en HTML «simplificado», «original» o, mejor aún, texto sin formato.
4. Aprende a identificar el phishing
Infórmate sobre las técnicas de phishing que utilizan los estafadores para que sepas en qué debes fijarte y no caigas en la trampa. También puedes descargar AVG Internet Security, que te protege del spam y las estafas antes de que lleguen a la bandeja de entrada.
5. No hagas clic
Nunca corras riesgos haciendo clic en vínculos ni abriendo archivos adjuntos incluidos en mensajes no solicitados. Podrías aterrizar en un sitio web con malware. AVG Internet Security te puede ayudar, puesto que detecta archivos adjuntos infectados y bloquea el contenido malicioso.
6. Si algo es importante, ten una copia a mano
Si un correo tiene información que no quieres perder, reenvíalo a otra dirección para que siempre dispongas de una copia. (Y recuerda utilizar una contraseña distinta y que sea fuerte para la segunda cuenta).
7. Usa la copia oculta (CCO)
Para proteger la privacidad de tus contactos, evita incluir las direcciones de todos en el campo «Para» al remitir o reenviar mensajes. Utiliza el campo CCO: de esta forma, los destinatarios no pueden ver quién más recibe el mensaje.
8. No utilices el wi-fi gratuito
¡Eso mismo! Es facilísimo que los ciberdelincuentes logren espiar tus actividades y te roben las contraseñas. Si no queda más remedio, no accedas al correo electrónico en una red wi-fi gratuita ni en ninguna otra que no esté protegida por contraseña. Mejor todavía, usa una VPN personal, como HideMyAss.
9. Nunca incluyas información confidencial en un correo
Ningún correo que envíes será jamás seguro al 100 % ni puedes controlar lo que hará el destinatario con la información que reciba, así que nunca envíes información privada, como datos de tarjetas de crédito, nombres de usuario o contraseñas.
Sugerencia adicional: usa una dirección de correo compleja
Si estás pensando en cambiar de proveedor de correo electrónico, vuélvete loco con la dirección. Cuanto más compleja sea, más difícil será que un hacker la genere automáticamente o la adivine a partir de tu nombre. Si tienes que usar tu nombre, añade números u otros caracteres, por ejemplo, lucas_delolmo_388@ejemplo.com.
Ten cuidado.